martes, 17 de abril de 2012

Hacemos lo que ELLOS quieren que hagamos

Parecerá ridículo y sin importancia pero es así. Podemos llegar a creer que todo está controlado, que es lo que queremos y que somos los que elegimos lo que tenemos, pero no.... no es así.

Compraremos en el sitio que nos parezca mas barato o de mayor calidad, nos haremos de la compañía de telefonía que mas nos de a cambio de menos y beberemos lo que decidamos que nos de la sensación de haber pagado a gusto.

Pero ¿habéis pensado en lo que tenemos y lo que nos ponen delante? es todo lo mismo, un mismo saco, un mismo producto que llega al mismo lugar. 

Lo mas triste de todo es que nos conformamos, sin reprochar o haciendo lo que creemos que es reprochar pero terminamos tragando.

Tendríamos que olvidarnos de las ofertas y los precios color amarillo y analizar lo que tenemos y lo que pagamos por tener algo que puede sernos totalmente innecesario.

Vamos a un bar y pedimos un whiskey, porque queda muy de tipo duro, incluso decimos la marca que queremos y la mezcla exacta con refresco de cola (del que decimos la marca también) y nos pueden poner en el vaso amoniaco que nos lo vamos a beber igual.